Llegaron cerca de las 9 de la noche al cuartel general. El viaje
de regreso había sido llenado por la tensión y el silencio, Len no hablo más de
lo necesario, quería olvidar todo lo ocurrido... y Luka se hizo cargo
del papeleo, no se quería mirar las caras con Len.
Al llegar se
dirigieron directo a la oficina del capitán. Luka iba detrás de Len,
inquieta por la actitud de este; "No lo entiendo...no sé mucho de
él...solo sé que quiere más que nadie destruir a Karakuri, pero... ¿por qué ha
tenido dos fallos seguidos?... ¡es ilógico!..." Sus pensamientos se
vieron interrumpidos por Len, que se había detenido y la hizo chocar con él,
habían llegado a la oficina, tocaron la puerta, pero no respondieron, repitieron
esta acción al menos tres veces más, pero todas obtuvieron el mismo resultado;
nada.
-¿Qué pasa? Ya
terminaron su misión por lo que veo-Dijo Mikuo detrás de ellos, con
su engreída sonrisa y su tono burlón.
-Mikuo-San ¿dónde
se encuentra el capitán?
-Está arreglando
unos asuntos debido a su fallo en la misión-Dijo burlándose, le era
divertido burlar a los demás.
-Ya veo...creo que
será mejor retirarnos-Luka y Len hicieron ademán de irse, pero fueron detenidos
por la voz de Mikuo.
-Luka-San, yo me
encargo de eso, si me lo permite-Dijo con una sonrisa nerviosa, que
más parecía una mueca, manteniendo la mano extendida y los ojos
clavados en el sobre.
-La
verdad preferiría entregarla el sobre personalmente al
capitán-Intervino Len, desconfiaba de ese tipo.
-Recuerda que soy
la mano derecha del capitán-Dijo desesperado, era imposible ocultarlo, deseaba
saber todo antes que Kaito.
Len lo miro con
desconfianza, hace tiempo Meiko la había advertido sobre él;
"No confíes en él", Luka miraba de la misma manera a Mikuo,
ninguno se esforzaba en ocultar su desconfianza hacia él. Pero Luka le entrego
el sobre.
-Bueno Será mejor
que descansen-Dijo Mikuo satisfecho, luego entro en la oficina del
capitán, cerrando la puerta detrás de sí; "Lo logre".
-¿Por qué se lo
entregaste?-Dijo Len una vez que se quedaron solos.
-No tenía opción,
además, él no es el único del
que desconfió-Sentencio dándole una mirada fulminante a Len.
Este le quito
importancia y se retiró a su cuarto, al llegar, se quitó su boina que tiro a la
cama, luego su chaqueta que tiro sin darle importancia, lo mismo hizo con su
corbata y camisa, solo llevando puestos sus pantalones, y
se recostó en la cama, sin siquiera quitarse los zapatos o ponerse el
pijama, poniendo sus manos detrás de la cabeza, y cerro su ojo, no deseaba
pensar en nada, menos recordar, pero al parecer le iba a ser imposible:
-Sí, yo
lo decidí...hace 10 años...que destruiría a Karakuri,
no dejaría escapar al mal...pero sigo sin obtener
resultados-Monologaba Len mirando el techo blanco de su cuarto-..."insuficiente"...-Dijo
recordando las palabras de la Karakuri...ese fue su último pensamiento antes de
caer dormido.
*En la oficina
de Kaito*
-Mm, ya veo, una
droga, con que eso era...de seguro Miku la hizo junto con Kamui, su plan está
saliendo bien por ahora...-Dijo sonriendo satisfecho-. nada me fallara, todo va
como deseo, ni Kaito, ni Miku, ni nadie sospecha lo que me traigo entre
manos-Se paró de golpe-."Cabeza, eres astuta, pero no tanto, sino no
tendría esto en mis manos, eres ciega...desapareciste ese día, mpf, jejeje,
pero no tengo de que preocuparme, después de 10 años dudo que ahora
aparezcas...pero ese chico...Kagamine, se me hace familiar, su cara o será su
nombre, lo mismo con la Karakuri de Miku...na, no importa, todo
me saldrá al final a pedir de boca.
Dicho esto Mikuo
dejo todo como estaba y se retiró.
Capítulo 9 Fin...
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No tengo palabras, solo que Mikuo se ganara el odio de muchos, y decir eso seria spoiler del feo...
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